México, conocido por su rica tradición futbolística, presenta un equipo competitivo para la próxima Copa América, liderado por destacados talentos cuyo valor en el mercado internacional resalta su importancia y potencial.
Encabezando la lista se encuentra Santiago Giménez, del Feyenoord, cuyo valor se estima en 40 millones de euros, seguido por Edson Álvarez, del West Ham, con un valor de 35 millones de euros. Ambos jugadores representan pilares fundamentales en el esquema táctico de Jaime Lozano, quien ha seleccionado cuidadosamente a los mejores para este desafío sudamericano.
El equipo mexicano también cuenta con Johan Vásquez del Génova, Julián Quiñones del Al Qadsiah y Erick Sánchez del Pachuca, todos valuados en 10 millones de euros cada uno. Esta diversidad de talento refleja la estrategia de Lozano para equilibrar la experiencia con la juventud prometedora, buscando no solo competir, sino dejar una marca en la competencia continental.
Aunque jugadores emblemáticos como Hirving Lozano, quien próximamente se unirá a la MLS, no están en esta convocatoria, la presencia de estos futbolistas subraya el compromiso de México por mantenerse en la élite del fútbol mundial y proyectar su talento en escenarios internacionales de alto nivel.
La Copa América será una oportunidad crucial para que estos jugadores demuestren su valía y contribuyan al éxito del equipo nacional, consolidando su posición como protagonistas en la escena futbolística global.