Contra todo pronóstico, la selección de Georgia logró una victoria histórica al derrotar 2-0 a Portugal, asegurando así su pase a los octavos de final de la Eurocopa 2024. Los georgianos, debutantes en el certamen continental desde su independencia, dieron el golpe en un partido perfecto disputado en Gelsenkirchen.
El partido comenzó de manera inmejorable para Georgia, con un gol de Khvicha Kvaratskhelia a los 92 segundos de juego. El extremo del Napoli, quien se destacó durante todo el encuentro, puso el 1-0 al minuto y medio, sorprendiendo a un equipo portugués que no logró recuperarse del golpe inicial.
A partir de allí, el partido se desarrolló según lo esperado: Portugal dominando la posesión y Georgia replegada en su campo, esperando su oportunidad para contraatacar. Sin embargo, los lusos, dirigidos por Roberto Martínez, no lograron profundidad en sus avances debido al orden defensivo georgiano. La falta de contundencia en el tercio final del campo portugués fue evidente, y figuras como Cristiano Ronaldo tuvieron una actuación discreta, sin intervenciones claves.
En el segundo tiempo, Georgia salió decidida a defender el 1-0, pero una jugada desafortunada para Portugal terminó por sentenciar el partido. Un error en la salida desde el fondo permitió a Luka Lochoshvili adentrarse en el área rival, donde Antonio Silva le cometió penal. Aunque inicialmente el árbitro Sandro Schärer no señaló la falta, el VAR intervino y se concedió el penal. Georges Mikautadze no falló desde los doce pasos, asegurando el 2-0 para Georgia y desatando la euforia en el equipo y sus seguidores.
Con esta victoria, Georgia avanza a los octavos de final, donde enfrentará a Inglaterra, uno de los favoritos del torneo. Esta clasificación histórica no solo es un hito para el fútbol georgiano, sino también una muestra de que en el fútbol, todo es posible. La actuación de Georgia en la Eurocopa 2024 será recordada como un ejemplo de determinación, carácter y calidad futbolística.
Este triunfo quedará en la memoria de los aficionados y servirá como inspiración para futuras generaciones de futbolistas georgianos. ¡Enhorabuena, Georgia!