La máquina le pasó por encima a los Pumas y con un marcador 4-2 se instalaron en semifinales donde se verán las caras vs Monterrey.
En la delantera, Uriel Antuna brilló con luz propia al convertirse en el referente ofensivo del equipo, culminando el torneo como el máximo goleador con 8 tantos. Su desempeño fue fundamental para impulsar el ataque de la Máquina.
En el medio campo, Charlie Rodríguez y Rivero fueron piezas clave en la generación de juego y en la presión sobre el rival. Rodríguez aportó con un gol y una asistencia, mostrando su versatilidad y dinamismo en todas las zonas del campo, mientras que Rivero se destacó en la banda derecha con 3 goles y 2 asistencias, demostrando su capacidad para desequilibrar.
En la defensa, Piovi se erigió como un pilar fundamental, superando un inicio complicado para convertirse en uno de los mejores centrales de la liga. Su promedio de 2.4 intercepciones por partido y un 60% de duelos terrestres ganados fueron reflejo de su solidez defensiva.
El arco de Cruz Azul estuvo resguardado por Kevin Mier, quien mantuvo su portería invicta en 9 ocasiones en los 19 partidos disputados, demostrando seguridad y confianza bajo los tres palos.
El trabajo del entrenador Anselmi ha sido fundamental en el éxito del equipo, guiando a Cruz Azul hacia las instancias finales del torneo. Ahora, el desafío será consolidar este rendimiento y luchar por el ansiado título.