La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) respaldó el martes la candidatura de Brasil para albergar el Mundial de fútbol femenino 2027, un torneo que nunca se ha disputado en Sudamérica y cuya próxima edición se jugará este año en Australia y Nueva Zelanda.
El apoyo fue anunciado por el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, en una conferencia de prensa junto a la ministra de Deportes de Brasil, Ana Moser, desde la sede del órgano rector del fútbol sudamericano, en la ciudad paraguaya de Luque.
“Esta candidatura viene a fortalecer el trabajo que nosotros venimos haciendo en cada país y como confederación. Nosotros vemos esto como una gran oportunidad de acelerar este proceso y que también, con el tiempo cuando se hable de Conmebol, independientemente del género, se reconozca como potencia”, expresó Domínguez.
Brasil ya fue sede de los mundiales masculinos de fútbol en 1950 y 2014, pero hasta ahora nunca había estudiado la posibilidad de postular su candidatura a la versión femenina.
Por otra parte, la ministra del Deporte brasileño, Ana Moser, destacó la capacidad de organización de su país y la importancia del fútbol en la búsqueda de la equidad de género y la lucha contra diversas formas de discriminación.
Además, señaló que la realización de este evento en Brasil sería un fuerte impulso para la promoción del deporte en Sudamérica.
El Mundial femenino de 2023 será disputado a partir del 20 de julio en Australia y Nueva Zelanda por 32 selecciones, incluyendo a la de Brasil, que quedó emparejada en el Grupo F con Francia, Jamaica y Panamá.